El 25 de marzo de 1957 puede considerarse el nacimiento de la Unión Europea. Francia, Bélgica, Italia, Luxemburgo, los Países Bajos y (en aquellos días) Alemania Occidental acordaron en el Tratado de Roma una unión aduanera. Con ello empezaron a crear un mercado único de bienes, trabajo, servicios y capitales en todos los Estados miembros. Hoy, la UE es una comunidad de 28 Estados miembros que cooperan en aspectos importantes no sólo para la economía, sino también para muchos otros ámbitos.
¿Recuerdas los tiempos en que a veces permanecías horas parado en la frontera con un país vecino, cuando primero tenías que calcular lo que costaba algo en tu moneda, cuando ponerse enfermo en vacaciones podía salir muy caro y una simple llamada telefónica costaba una fortuna?
Veamos algunos de los logros de la UE que han cambiado nuestras vidas y que hoy nos resultan bastante comunes:
El espacio Schengen permite a más de 400 millones de personas viajar libremente entre los países miembros sin pasar por controles fronterizos. 17 millones de ciudadanos de la UE viven o trabajan en otro país de la UE.
La UE ha logrado una posición fuerte al actuar unida con una sola voz en la escena mundial, representa alrededor del 15% del comercio mundial de mercancías.
En 2014 la UE alcanzó su objetivo para 2020 de reducir un 20% las emisiones de gases de efecto invernadero. Hasta 2050, la UE aspira a la neutralidad climática.
Más de 340 millones de ciudadanos de la UE utilizan el euro, que ha eliminado el riesgo de fluctuación de la moneda y los costes de cambio. Los depósitos bancarios de hasta 100 000 euros están protegidos. Los servicios telefónicos y en línea no tienen costes adicionales.
La Comisión Europea ha adoptado varias políticas para reforzar el compromiso de Europa con la igualdad: una estrategia de igualdad de género, un plan de acción contra el racismo, un marco estratégico para los gitanos, una estrategia para los derechos de las personas LGBTIQ y una estrategia para los derechos de las personas con discapacidad.